En contacto con lo mejor de sí mismo
Breve encuadre
En este taller trataremos de entrar en contacto con lo mejor de nosotros mismos, a través del reconocimiento de las cualidades positivas de cada cual y la proyección de éstas hacia el mundo. Será de interés, lograr un estado de conexión con lo mejor de uno mismo, de manera que en el reconocimiento de esas cualidades se pueda experimentar un sentimiento de amor y compasión para con uno, facilitando así un estado emotivo que ayude a la posterior experiencia con la fuerza interna… experiencia que nos abre las puertas al posible desarrollo del espíritu, tal como se indica en el siguiente párrafo referido a la nueva espiritualidad:
“El ser humano en su bondad, en la eliminación de las contradicciones internas, en sus actos conscientes y en su sincera necesidad de evolución, hace nacer su espíritu. Para la evolución son necesarios el amor y la compasión. Gracias a ellos es posible la cohesión interna y la cohesión entre los seres que posibilitan la transmisión del espíritu de unos a otros. Quien trabaja para sí en el amor y la compasión, lo hace también para otros seres.”
1. El reconocimiento de las cualidades en uno
A menudo, mi sentir como ser humano va unido a lo negativo. “Yo, es que soy así”, “Siempre me pasan las mismas cosas”, “Hay cosas que no puedo superar”, “Yo para esto no sirvo” etc. son frases que a menudo decimos y que reflejan un tipo de mirada negativa respecto a nosotros mismos.
Esto sucede porque los problemas, las dificultades parecen más reales al ir acompañadas de tensiones en el cuerpo. Por ejemplo, cuando estoy preocupado enseguida me duele la cabeza, o se me cierra el estómago, o se me tensa el cuello…
En cambio, lo positivo va asociado a sensaciones de distensión, parece que fuera algo más liviano, sin peso, por eso puede pasar fácilmente desapercibido.
Hemos de tener en cuenta que –además- el sistema en el que vivimos influye fuertemente sobre nosotros y un sistema que fomenta la desconfianza, la incomunicación, la competencia, la crítica destructiva, los aspectos negativos en general, no es un ámbito adecuado para potenciar las cualidades.
Si pudiéramos cambiar nuestra mirada, partir siempre de lo positivo, nos sentiríamos mucho más ligeros y capaces de hacer grandes cosas. Lo negativo siempre nos violenta y nos resta.
¿Dónde dice que para mejorar personalmente he de fijarme en los defectos que tengo que cambiar y no en las cualidades que puedo potenciar?
Todos tenemos aspectos que no nos gustan, pero también tenemos muchas cosas interesantes. La propuesta es justamente partir de lo positivo, de lo interesante, de las virtudes, de las cualidades positivas, para cambiar en la dirección que anhelamos, aquella que puede permitirnos avanzar y trascender.
2. Trabajo de experiencia sobre las cualidades:
a) Escribir una lista de las cualidades positivas. Es importante hacer este trabajo sin pudor y sin censuras.
b) ¿Qué cualidades observan los demás participantes en mí?
Es interesante tener en cuenta, en el contacto con otros seres humanos, qué es lo positivo que uno proyecta de sí mismo.
En ese reconocimiento de las mejores cualidades de uno y del otro, es donde podemos encontrarnos los seres humanos. Tal reconocimiento nos sirve de puente de conexión entre unas personas y otras. Apoyarnos en nuestras mejores cualidades y en las de los demás, es una buena condición para facilitar el desarrollo espiritual individual y colectivo. Esa irradiación de lo mejor de uno hacia el mundo facilita la transmisión del espíritu en las relaciones humanas.
En este trabajo anotaremos las cualidades positivas que ven los otros participantes en uno (anoto sin responder)
c) Teniendo en cuenta la lista de cualidades y las que los otros me indicaron, buscaré aquellas que al evocarlas internamente me producen una conmoción muy positiva.
3. Breve explicación de lo que se hará a continuación:
Desarrollaremos varios trabajitos seguidos, sin cortes. No será necesario anotar nada.
A continuación pondremos un audio con una música calma que invite a realizar el ejercicio “c” donde, como hemos comentado, se trata de ir evocando aquellas cualidades que producen en uno más conmoción.
Posteriormente, siguiendo con los ojos cerrados, se guiará un breve relax, para dar paso a la experiencia con la fuerza interna, tratando de tomar contacto con esa energía que nos mueve e impulsa. Seguidamente, intentamos conectarnos emocionalmente con los otros partícipes, sintiendo su presencia, para compartir la Fuerza con ellos, reforzando su efecto .
El objetivo es que todos tengamos la experiencia de dar y recibir el Pasaje de la Fuerza… manifestación pareciera, de ese principio espiritual que está latente en cada ser humano y que podemos desarrollar trabajándolo.
4. Breve comentario final
En este taller hemos compartido la sensación de comunicación sincera y profunda como experiencia fundamental que engrandece al espíritu humano.
No se trata de grandes discursos ni novedosas formulas de crecimiento personal o social, se trata de algo más sencillo, más cálido, algo que comienza a transformar las relaciones, que dividen y distancian a las personas, en algo fraterno y universal.
Hemos compartido la sensación de lo necesario que es el otro, de su grandeza, reconociéndome en ella y sintiéndome parte de su espíritu.
Tener en cuenta las mejores cualidades es acercarse al contacto con lo mejor de sí mismo, provocando en nosotros un sentimiento de amor y compasión que busca expresarse en el mundo.
Y es en esa conexión profunda con lo mejor de sí mismo donde se puede iniciar un camino de evolución, donde el trabajo de la atención sobre los propios actos facilite la eliminación de las contradicciones, donde la bondad vaya ganando terreno, donde podamos reconocernos en la mirada del otro como esencia de libertad.