Espacios no violentos

Construyamos espacios no-violentos es un intento para impulsar la creación a distancia, a través de las redes sociales, de grupos de trabajo y apoyo mutuo sintonizados en una misma dirección: la superación del sufrimiento y la búsqueda del sentido de la vida en base a la enseñanza de Silo. Espacios no violentos son, por ejemplo, las Comunidades de El Mensaje de Silo, de cuya construcción puedes participar.

Un espacio no-violento es: Un ámbito integrador, sin discriminación; amable, sin agresividad; reconciliador,  sin resentimientos, con responsables, sin “culpables”. Un espacio de comprensión y respeto entre pares. Un espacio que brinda amistad y alegría de vivir, ayuda y esperanza: fe en el futuro no violento personal para toda la humanidad. Y en nuestro interior es: Un estado de paz, de reconciliación interna y con los demás, de apertura a otras personas y de fe en la posibilidad de cambio.

“Construir espacios no violentos” internos y compartidos, es superar la violencia interna: el rencor, el odio y el deseo de venganza, ampliando el “espacio” de comprensión, reconciliación, compasión, de respeto y amor al prójimo. Es superar la violencia externa por la  convergencia entre las personas, compartiendo ideales, sentimientos y procedimientos orientados al desarrollo personal y social, creando condiciones para que se exprese lo mejor de cada uno y del conjunto.

No compartimos la creencia en la “naturaleza violenta” del ser humano. Creemos más bien que el ser humano tiene un infinito potencial que puede dirigir hacia “lo creativo” o “lo destructivo” y que las experiencias contradictorias o unitivas lo condicionan  en una u otra dirección. Así, una persona se torna más o menos violenta, más o menos bondadosa, según su experiencia en una u otra dirección. En una sociedad fuertemente individualista, en la que la violencia –en todas sus formas– está en el trato cotidiano, es de importancia desarrollar y fortalecer una actitud, un comportamiento y una cultura basados en la no-violencia.