Seminario sobre la Regla de Oro y las acciones transformadoras
Este seminario tiene una duración de un día y la llegada de la gente es en la mañana.
Ceremonia de Oficio
Encuadre
Este día de trabajo estará dedicado al estudio, reflexión e intercambio sobre la Regla de Oro y las acciones transformadoras en el mundo, que repercuten en la gente cercana y en nosotros mismos y cuya influencia es interminable. Hoy investigaremos mediante la propia experiencia, el estudio, la reflexión y el intercambio, acerca de la Regla de Oro en nuestra vida personal y, también, cómo ese Principio de Acción Válida se traduce en orientación de nuestra acción social con El Mensaje de Silo. Para este trabajo haremos algunas de nuestras ceremonias de Experiencia y estudiaremos el tema formativo La Regla de Oro.
Primer trabajo
Lectura e intercambio en grupos: Tema formativo La Regla de Oro.
Descanso.
Segundo trabajo: La Regla de Oro
Nuestro principio ético guía para las acciones es aquel que dice: Trata a los demás como quieres que te traten. Para nosotros no existe una moral más elevada capaz de orientar la conducta humana, tanto personal como socialmente. Cuando lo aplicamos concientemente, nos ubicamos de inmediato como par del otro, no por arriba ni por abajo. Y tal emplazamiento mental es lo que permite la verdadera solidaridad e igualdad para coexistir. “Yo” no soy el centro del mundo, “nosotros” existimos y la conducta violenta, en todas sus formas, encuentra difícil echar raíces en esta atmósfera mental. Este principio orienta nuestra aspiración de coherencia personal, uniendo nuestros pensamientos, sentimientos y acciones. Nos permite superar nuestras contradicciones personales y da lugar a nuevos pensamientos, nuevas emociones y nuevas acciones, sea en el campo de las relaciones personales o en el campo de lo social. Se trata de una postura moral ante la vida y su justificación universal es el registro de unidad interna que todas las personas experimentan cuando sus acciones son verdaderamente orientadas por esta comprensión.
En el Mensaje de Silo tenemos la oportunidad de profundizar nuestra experiencia interna mediante las ceremonias, mediante la libre interpretación y el intercambio con otros sobre diversos temas, tales como la muerte, la inmortalidad, lo sagrado y el sentido de la vida, entre otros. Estas experiencias parecen ir formando una suerte de “atmósfera interna”, una nueva forma de experimentarse a sí mismo y a la vida en general, y es desde el propio mundo interno desde donde nuestras acciones se extienden y terminarán en otros. Algunas de nuestras ceremonias, como la de Oficio y de Imposición, son relativas a la experiencia interna. Otras, como las de Bienestar, Protección, Matrimonio, Asistencia y Muerte son, además, sociales y tienen que ver con nuestra forma de tratar a otros. A su vez, la ceremonia de Reconocimiento consiste en una experiencia personal de declaración de principios, pero esta declaración tiene también que ver con un compromiso social para con el mundo al que se aspira.
La Regla de Oro es orientación clara de nuestra relación con otros y si nos interesan las acciones transformadoras, hemos de considerar que todas las acciones dirigidas a los demás se configuran dentro de mi mundo interno que está teñido por mi atmósfera mental. En tal sentido, según sean mis pensamientos y sentimientos, mis acciones se configurarán y expresarán de determinada manera en el mundo, ejerciendo su influencia sobre aquellos que son “receptores” de ellas. Mi forma de tratar a otros termina en ellos, sea que los beneficie o no, y sus acciones terminarán en otros más y así siguiendo. También yo mismo experimento mis acciones hacia los demás y ese registro queda en mi memoria influyendo con esa atmósfera mental que siempre estoy construyendo, en forma positiva o negativa. Pareciera que todos influimos y somos influidos por otros, lo cual es importante de considerar. No es indiferente cómo llevamos nuestras vidas por cuanto nuestras acciones no terminan en sí mismas sino que continúan en otros y en nosotros mismos.
Esto es muy claro en la Ceremonia de Muerte. Allí estamos, la vida del ser querido ha cesado de actuar en su cuerpo. No más “acciones” ese cuerpo realizará y, sin embargo, podemos sentir y reconocer la influencia viva de sus acciones en nosotros mismos. Tratemos de imaginar esa situación.
Experiencia
Cerremos los ojos. Recordemos a un ser querido que haya partido.
Seguidamente se lee la Ceremonia de Muerte.
Se da lugar a intercambios con los que quieran hablar.
Comentarios
Acá podemos ver cómo el trato del otro hacia nosotros y el trato experimentado en nuestra relación con ese otro nos ha cambiado y continúa actuando en nosotros, transformando nuestras acciones hacia otros. En ese sentido podemos ver cómo la Historia, el gran acumulador y transformador de las acciones realizadas por quienes nos precedieron, continúa hoy en nosotros. Comprender esto puede despertar en nosotros una nueva compasión y tolerancia. Y así como “nadie” ha de ser culpado por la desgracia actual tan extendida, cada persona asumirá, o no, como responsabilidad personal el ayudar a transformar los procesos destructivos en fuerzas que favorezcan la vida.
Ceremonia de Bienestar
Almuerzo (una hora)
Tercer trabajo
Hemos visto algo acerca del Principio de Solidaridad o la Regla del Oro que dice: Trata a los demás como quieres que te traten. Hemos visto que la continuidad y consecuencia de las acciones es un mundo complejo, que su influencia no tiene fin y cómo siguen en el paisaje humano en constante transformación. También hemos visto cómo hay acciones que benefician a los demás en el mejor sentido y otras que no. En el Mensaje de Silo tenemos ese Principio traducido y elevado a una afirmación compartida de experiencia, ideales, actitudes y procedimientos. Ello se observa en la ceremonia de Reconocimiento y a la luz de nuestro interés es muy apropiado su estudio.
Estudio e intercambio en grupos: Ceremonia de Reconocimiento
Anotaciones del grupo
Lectura e intercambio en conjunto.
Descanso.
Ceremonia de Oficio
Ceremonia de Reconocimiento
Ágape de amistad.